Treinta y cinco.Ese numero aglomeraba en dos palabras su vida.Treinta y cinco primaveras ni una mas ni una menos.No habia ningun cumpleaños al que echarle la culpa y se vislumbraban ciertas arrugas ya frente al espejo.Con dos hijos y todavia media vida por soñar.A veces cuando le daba por soñar nunca dormia,y ahora que duerme a pierna suelta ya no sueña.Trabaja diez horas al dia en una agencia de telecomunicaciones,aguantanto a clientes insatisfechos y desesperados con sus contratos enrevesados y llenos de promesas sobre ciertos descuentos,que si somos sinceros,nunca llegaran.
Era lunes.Un dia para volver a emepzar,el principio de la semana y todavia cuatro dias para tocar ese minusculo trocito de cielo llamado finde semana.Eran ya las nueve y media de la mañana y ahi estaba ella sentada frente a su gran mesa redonda con su microfono preparado para recibir llamadas y su gran taza de cafe con tres de azucar,porque la vida ya era demasiado amarga.De repente empezo a sonar en su movil la novena sinfonia de bethoveen.Casi nunca la llaman y si ocurria tal milagro solia ser su ex marido,su madre o sus dos mejores amigas.Miro en la pantalla,"oculto".¿Oculto?"¿quien podia llamarla con un numero oculto??le temblaman los labios,ella era de esas personas que se ponen nerviosas con estas tecnologias del siglo veintiuno.En un ataque de valentia decidio contestar"¿Si?"Nadie hablaba al otro lado.¿Si?¿Hola?Nadie ningun ruido se precipito por el telefono.Colgaron.Quizas es que no entendia bien aquel bichejo con teclas pero estaba segura de que todavia el cafe no le habia causado ninguna confusion mental y que su telefono habia sonado hace pocos segundos.Entro en el menu de su movil,vageuando un poco por el artilujio entro en el registro de llamadas.Enviadas,marcadas,aceptadas....¡Aceptadas!Hay debia estar aquella extraña llamanda.Inteto mirar el numero,imposible de ver.Miro cuanto habia duraro la llamada,9 segundos.No le dio mas importancia hasta llegar al martes.9 y media de la mañana,la rutina de todos los dias.Pero justo a la misma hora del lunes empezo a sonar la cancioncilla de su movil.No se lo penso dos veces e inmediatamente cojio el movil¿Si?Nadie contestaba la otro lado.¿Si?Su tono de voz empezo a tener una pizca de confusion y de enfado.Colgaron.Y era el segundo dia que alguien la llamaba a la misma hora y tardaba en colgar los mismos segundos!Empezo a cabilar por segundo dia quien podia ser el responsable de tan extrañas llamadas.De repente su mente tomo alas,¿proque no un admirador?La idea le rondo durante varias semanas.Seguia recibiendo aquella misma llamada a la misma hora y durante los mismos segundos.Aquel aparato se convirtio para ella en un camino directo a la felicidad.Un conjunto de plastico plomo,mercurio y cientos de materiales mas casi impronunciables, que al fin y al cabo le habia dado alas.Se habia convertido en su objeto mas preciado su fuente de ilusiones.Parecia ironico que unas simples llamadas pudieran causar tal cumulo de sentimientos en ella.Fueron pasando los meses el otoño dio paso al invierno,y este a su vez a la primavera.Las llamadas se fueron sucediendo mes a mes hasta llegar a un soleado dia de mayo.Espero,como cada dia,impaciente la llamada de aquel hombre.Eran ya casi las 10 y en su movil aquel admirador no habia dado señales de vida.Alomejor podia ser la bateria asique descompuso su movil en mil piezas y como si de un puzle se tratara volvio a armarlo.Nada.Ni tan siquiera una llamada perdida.Empezo a preocuparse por aquella persona que la llevaba haciendo feliz desde hacia varios meses.¿quizas le habia pasado algo?¿se habra quedado sin saldo?¿Y si ha encontrado a otra?¿y si se habia cansado de este estupido juego?Pasaron varios dias hasta que dejo de derramar una lagrima cada vez que se acordaba del tema.Decidio que se acabaron las nuevas tecnologias para ella,su proxima relacion a distancia seria por carta.No volveria a ser tan ingenua de creer que alguien podia haberse fijado en ella y que podia estar tantos meses llamandola solo para oir su voz.Se acabaron las antenas,los bits,las pantallas,las teclas...renegó del siglo en que vivia una y mil veces.Cojio el telefono en la mano y cuando se disponia a terminar con toda esta nebulosa de sueños,su movil empezo a vibrar y a parpadear durante varios segundos.le temblaban las manos,las piernas e incluso los pensamientos.Abrio rapidamente la carpeta de "mensajes recibidos",no ponia ningun numero de remitente.Cojio aire y empezo a leer:Siento no haber acudido a nuestra cita a las nueve y media.He estado ingresado,tu admirador es un poco asmatico,pero tranquila ya estoy bien.¿por que no nos dejamos de frias llamdas y nos conocemos,tu y yo,sin ningun bit de por medio.Planta cuarta numero de habitacion 453"Estaba perpleja,asombrada,llena de vida.No quiso hacer esperar a aquel hombre que nueve segundos al dia la habia hecho tan feliz.No tardo mas de veinte minutos en llegar al hospital,busco entre la planta aquella habitacion.Suspiro antes de entornar el pomo desgastado de la puerta,entro.Y alli estaba ella,contemplando la sonrisa de aquel hombre cuyo origen no podia casi imaginar.
